Prácticas de higiene para mantener tus ojos sanos
Los lentes de contacto son una excelente opción para corregir la visión, pero es importante tener en cuenta los riesgos asociados, como las infecciones oculares. Sin embargo, con prácticas adecuadas de higiene, puedes mitigar estos riesgos y mantener tus ojos sanos mientras usas lentes de contacto.
1. Lávate las manos antes de manipular los lentes
Antes de manipular tus lentes de contacto, es fundamental lavarte las manos con agua y jabón. Esto ayuda a prevenir la transferencia de bacterias y otros microorganismos a tus ojos, reduciendo el riesgo de infecciones.
2. Limpia y desinfecta tus lentes regularmente
Es importante limpiar y desinfectar tus lentes de contacto siguiendo las instrucciones proporcionadas por tu profesional de la salud visual. Utiliza soluciones adecuadas y cambia el estuche de almacenamiento regularmente para evitar la acumulación de bacterias.
3. Evita el contacto con agua y líquidos no estériles
Los lentes de contacto nunca deben entrar en contacto con agua corriente, saliva, o cualquier otro líquido no estéril. Esto puede aumentar el riesgo de contaminación y provocar infecciones oculares graves.
4. No uses los lentes por más tiempo del recomendado
Sigue las instrucciones de tu profesional de la salud visual en cuanto al tiempo de uso de tus lentes de contacto. Usar los lentes por más tiempo del recomendado puede provocar sequedad ocular, irritación e incrementar el riesgo de infecciones.
5. Programa revisiones regulares con tu optometrista
Programa revisiones regulares con tu optometrista para monitorear la salud de tus ojos y garantizar que tus lentes de contacto sean adecuados para tu visión. Esto permite detectar y tratar cualquier problema ocular antes de que se convierta en una infección grave.
Al seguir estas prácticas de higiene y cuidado, puedes disfrutar de una experiencia segura y cómoda con tus lentes de contacto, manteniendo tus ojos sanos y libres de infecciones.